
Amelia se despertó en la penumbra, el amanecer aún no entraba por sus pesadas cortinas. Normalmente dejaba la luz encendida en el pasillo, por si necesitaban levantarse al baño o si hacía falta atender a José. La luz permaneció cortada como en muchas otras ciudades del país. Antes de dormir, su celular había perdido … Continuado