
ROPA BLANCA No podía evitar un profundo desasosiego, cuando abría aquel armario en el que guardaba celosamente la ropa de familia. Aquel ajuar que había pasado de madres a hijas, y que ahora no utilizaba por una cuestión práctica. No se podía permitir el lujo de andar entre embozos y almidones. Tan … Continuado