Las puertas de la pequeña iglesia están abiertas y dos largas filas de monjas salen llevando cirios en la mano y cantando un salmo. El Padre Matías va en medio y detrás, unos hombres cargando con un ataúd sobre los hombros. Bajan la larga escalinata de la iglesia y se dirigen al cementerio, … Continuado