
Cinco, veintiséis, treintaitrés, veintiséis. Me lo aprendí cuando era muy pequeña, junto con la dirección (Perú, cientotreintaiséis, interiorcuatro)y mi nombre completo –nombre artístico, en aquella época– “Caquel Cato Miau”, que era más fácil de pronunciar y más interesante que Raquel Castro Maldonado. Mi mamá invirtió mucho tiempo en asegurarse de que me aprendiera esos datos. Insistía en … Continuado