BESTIA*. Joel Alba
I La bestia llegó días después del eclipse. Varias noches antes los ancianos presagiaron su visita. Tras observar los sellos del cielo y leer la voz fría de lo inminente, supieron qué se avecinaba. Los jóvenes, empero, que se creían capaces de escapar por sus piernas ágiles de cualquier augurio; por no entender la … Continuado