LAS ISLAS. Xalbador García
Junto al aeropuerto encontró un malecón. Hacía frío como en los sueños. La mañana era una mujer desnuda que se extendía en el horizonte. Confirmó que cuatro horas más tarde saldría su vuelo. Gozaba de buen tiempo para conocer la zona. Al igual que el abrigo, los guantes eran grises. Algunos dólares que, más tarde, … Continuado