
No tengas miedo, le dice Calibán a Stefano en La Tempestad, la historia que, como la isla que conquista Próspero, está llena de ruidos, sonidos y aires dulces, que dan deleite y no dañan. Calibán es el monstruo. El infrahumano. El caribeño. El caníbal. Fagocita gente como al aire. A veces, mil instrumentos vibrantes zumbarán … Continuado