En la Parte I de mi plática con Alfredo Triff, nos familiarizamos con algunos datos fundamentales en su trayectoria artística e intelectual. Continuemos con el intercambio.

6. Es un hecho que tú y yo somos parte de las ahora variadas comunidades congregadas en Miami, antigua capital del exilio cubano. Comparada con otras ciudades de los Estados Unidos: ¿qué peculiaridades podemos mostrar al mundo como centro cultural, si lo es o si existe la posibilidad de que lo sea? En caso de que no lo sea, ¿qué contribuciones se necesitarían para ponernos a la altura de ciudades como Madrid, París, Viena o New York?

No hay capitales. Vivimos una etapa de globalización; es decir, la parte ha sido engullida por el todo. Es funesto para el arte y la cultura. ¿Por qué? Casi todo se homogeneiza.

Vista concierto bilateral de la Orquesta Sinfónica de Miami en su sede de la histórica Miami Beach.

7] Cierto… desde luego con algunas excepciones, pero cierto. Es precisamente el statu quo de lo que yo he denominado «El imperio de la Mediocridad», que mencionaba con anterioridad: una ironía emblemática que ante mis ojos deja ya de ser hipótesis. Quizás sería un poco borrascoso insinuar que nuestra área no escapa de la inclusión en ese estado catastrófico que sugiere el criterio que expones y que, hasta cierto punto, personalmente comparto. Es decir: somos propietarios de una común opinión, quizás en un sentido generalizado. Sin embargo, a pesar de las imperfecciones del área, Miami es el «cementerio de elefantes» preferido de individuos que, independientemente de que agreguen algún aporte a la historia cultural de la ciudad o no, consiguen un sueldo de retiro sin haber trabajado lo suficiente en esta nación, si me explico.

Imagen de acción en una de las sesiones anuales del Art Basel en Miami Beach.

Para personas más jóvenes, la zona ofrece oportunidades de trabajo y, respecto al crimen organizado, creo que, en ese aspecto, las cosas han cambiado bastante, comparadas con aquella época ya lejana que motivó la creación de la serie «Miami Vice». Y en cuanto a seguridad, disfrutamos un poco más de esa tranquilidad que buscamos. De todas maneras, te re disparo la pregunta: ¿Qué carencia de elementos culturales en la comunidad crees perciben otros ojos fuera de nuestros entornos?

Mario Ernesto Sánchez, director de Teatro Avance y la alcaldesa del Condado Miami- Dade Daniella Levine Cava, en la primera noche de la representación de «Al pie del Támesis» en el Dade County Auditorium, Miami, 2024.

La carencia se ha hecho “invisible” porque hay carencia en todo.

Ángulo del teatro de vagones en el patio del Centro Cultural Español en Miami.

8] Es una brillante conclusión, aunque elijas no elaborar en el contenido y nos sumerjamos ambos en esa invisibilidad fenomenológica que sugieres. De mi parte, admito que no me gusta el progreso desmedido que agrega más vehículos a nuestras calles. Tampoco me gusta el crecimiento pseudo económico que fabrica al por mayor avenidas y rascacielos, constriñendo así el paisaje tropical que todavía conservamos y disfrutamos. Sin embargo, considerar a Miami un desierto cultural —descripción que he escuchado en más de una instancia— es alimentar una especie de estigma creado fuera de nuestros entornos.

Algunas de las paredes de la peculiar vecindad del Wynwood de Miami.

Mis observaciones siempre tratan de combatir esa inmerecida reputación que comparten muchos que se criaron bajo los efectos de propagandas sistemáticamente planeadas. Pero permíteme remontarme a la primera pregunta: es prácticamente imposible, separar tu afición a la escritura de la composición musical o divorciar tu apego al arte en general de la noble profesión de la docencia —desde luego, siempre dentro de los parámetros de acción y pensamiento—. ¿No crees que esto es una marca sui géneris que te define o quizás te persigue?

Definitivamente un hechizo maligno. (Risas)

Amigos, colegas y conocidos, se encuentran en uno de los salones del Museo Americano de la Diáspora Cubana en Miami.

9] De hecho, me parece que tu reacción encaja muy bien con una peculiar sensación que frecuentemente invade al artista o al intelectual. Teniendo en cuenta ese gusto o afición que transpira la respuesta y descuella en tu carrera pedagógica —además de una diaria interacción con alumnos de todo tipo y/o nacionalidades— ¿cómo desearías tú que las próximas generaciones te recuerden?

Eso se lo dejo al magnánimo futuro. (Más risas)

De izquierda a derecha: Legna Rodríguez, Waldo Pérez Cino, Rosie Inguanzo , Alfredo Triff, Ramón Williams, Héctor Manuel Gutiérrez, y Magalys Fernández, compartiendo inquietudes culturales tras la presentación de uno de los libros de Waldo en una acogedora aula de clases del Miami-Dade College.

10] Escucho tus palabras, y en seguida me viene a la mente un par de libros tan simpáticos como informativos: «Filosofía del cubano… y de lo cubano», del recientemente fallecido profesor Don Pepe Sánchez Boudy, y el ya clásico «Manual del perfecto fulanista» de su tocayo José Antonio Ramos… entonces, te pregunto: ¿Qué importancia ha tenido la lectura en general y el imaginario cubano en particular, en tu formación cultural y perspectiva estética?

Me siento muy cubano. Y esa mata cubiche sigue dando (y yo agarrado a la teta chupando).

Dos ejemplos de las peculiaridades de «La Sagüesera» en Miami y «La 12 y 46» en Hialeah.

11] Tras tu fugacísima respuesta, supongo que debo decir: «Bueno, eso lo explica todo», [Aún más risas] pero mejor decido concluir mi cuestionario con varias preguntas en una. En tu actitud interior e interrelación con la sociedad actual, ¿existe la influencia de algún pensamiento filosófico, siempre presente en la percepción que guía tus instintos y preferencias? En vista de los acontecimientos mundiales de las últimas décadas, que incluyen crisis económicas, conflictos bélicos, migraciones masivas, abusos de poder, aumento de la criminalidad, y demás fenómenos, tanto humanos como naturales, desde tu perspectiva como individuo pensante: ¿te preocupa la situación mundial? ¿te sientes optimista, pesimista… o intervienen otras modalidades en tu forma de ver las cosas?

Los acontecimientos…(pausa) a ver: Ortega y Gasset cita a Platón «la filosofía es la ciencia de los deportistas». Hay que mantenerse en forma —hablo del espíritu—. Acepto la realidad tal y como es. A veces me encabrona, y la critico apasionadamente, pero a fin de cuentas la acepto (inclusive la admiro). No vale la pena amargarse. La absoluta verdad es lo que es. Y siendo, ya es sencillamente insoslayable. Estamos prestados en el tiempo y no queda otra sino maravillarse.

Un espléndido momento en el que los artistas Briana Méndez, Carlos Fabian Medina, Dayna Maldonado y Roxana Barba muestran sus dotes interpretativas. La obra «Apuntes americano-Kanay», escrita por esta última, se presentó en el acogedor auditorio del Kubek Center del Miami Dade College. La foto es cortesía de Paulo Cezar Alves.

Absolutamente asimilada en mi ínsula tu respuesta, mi estimado amigo. Me consta que es una reacción fundamentalmente filosófica que abriría puertas a un segundo topetazo cultural con el entrevistador. Sin embargo, siendo yo este pobre docente vestido de periodista un confesado estoico con toques de probada, comprobada y —como bien sabes— confirmada resiliencia, debo concluir que ese reencuentro puede que nunca llegue. ¿Por qué? —quizás preguntarías— y la razón cae por su propio peso: a pesar de las idiosincrasias ontológicas que he aprendido o heredado, para mí, el futuro no siempre se cristaliza como magnánimo. Por supuesto, mi refutación ya era convicción, aún antes de empezar nuestro coloquio. De modo que esta vez, cerrando las cortinas que dieron paso a nuestro espectáculo privado, sólo me queda agradecer una vez más la oportunidad de entablar quizás un dislocado o estrambótico, pero a la vez significativo intercambio de ideas con un individuo de tu calibre.

Presencia renacentista en el sudeste de Miami, el Palacio Vizcaya.

Me atrevo a recomendar entusiastamente la lectura de por lo menos cinco de las obras publicadas por ti. Son cuadernos que, por supuesto, he leído, digerido y conservado, resguardados todos en mi biblioteca personal. Por lo menos dos de ellos han sido autografiados por el autor, como observamos en la Parte I de nuestro encuentro fortuito y revelador.

Alfredo presenta su libro «Barbey d’Aurevilly, dandi entre los dandis» en la librería Books & Books de Coral Gables,

el 15 de mayo del 2024.

Como es ya costumbre, y agradeciéndole a Alfredo la oportunidad que me da de entrevistarlo, me despido con una nota discreta. A los lectores que sienten que las respuestas del interpelado son un tanto breves: doy fe de que todas ellas —sin excepción— tienen asegurado su complemento en el contenido de los libros citados. He aquí la lista de los títulos, en orden cronológico para que, como he hecho yo, se animen a adquirirlos:

1.     ART & THE INTERSTICE: 1991.

2.     ¿QUÉ PODEMOS HACER? UN REPORTE DE URGENCIA: sin fecha de publicación.

3.     PULPA: 2000.

4.     ¿POR QUÉ EL PUEBLO CUBANO AÚN APOYA AL CASTRISMO?: 2023.

5.      BARBEY D’AUREVILLY, DANDI ENTRE LOS DANDIS: 2024.

Quod scripsi, scripsi.

© All rights reserved Héctor Manuel Gutiérrez.

Héctor Manuel Gutiérrez, Ph.D., es instructor de español avanzado y literatura hispana. Funge como Lector Oficial de Literatura y Cultura Hispánicas en el programa de evaluación superior Advanced Placement, College Board/ETS. Colaborador mensual de la revista musical «Latin Beat», Gardena, California. Miembro/fundador de la revista literaria «La huella azul», FIU, Miami, Florida. Editor de contribuciones, «Revista Poetas y Escritores Miami», Miami, Florida. Colaborador «Revista Suburbano», Miami, Florida. Colaborador/ columnista, «Nagari Magazine», Miami, Florida. Colaborador «Linden Lane Magazine», Fort Worth, Texas, Colaborador, «Insularis Magazine», Miami, Florida. Es autor de los libros: Cuarentenas, Cuarentenas: Segunda Edición, Cuando el viento es amigo, Dossier Homenaje a Lilliam Moro, De autoría: ensayos al reverso. Les da los toques finales a Encuentros a la carta: entrevistas en ciernes, a publicarse en 2024, La utopía interior: estudio analítico de la ensayística de Ernesto Sábato, a publicarse en 2025, y la novela El arrobo de la sospecha, a publicarse en 2026.