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Diciembre 2014

NAGARI CONVERSA CON LA ESCRITORA MEXICANA ELENA PONIATOWSKA

Elena Poniatowska“Como periodista yo quiero ir a donde no conozco, oír lo que nunca me han dicho.”

Elena Poniatowska Amor

Domingo 16 de Noviembre de 2014, 14:40 horas tiempo local de Miami una tarde agradable en Downtown, una sala de juntas en el Hilton donde nos preparamos para conversar con una de las figuras más emblemáticas de las letras mexicanas e hispanomericanas: Elena Poniatowska Amor.

Elenita como muchos nos atrevemos a nombrarla aún sin conocerla personalmente.

¿Por qué esta manera de referirnos a quien ha sido galardonada con el Premio Cervantes de 2014? Porque Elena (Elenita) Poniatowska Amor es una mujer cuya personalidad transpira bondad y calidez en cada poro de su ser. Firme en sus convicciones a favor de los más desposeídos, de los sin voz, conversar con ella es como conversar con una hermana, con una hija, con una madre por el vínculo de complicidad que genera el entrar en contacto con su persona, por su ausencia de solemnidad que se refleja en un lenguaje desenfadado lleno de mexicanismos. El activismo político está íntimamente arraigado en su obra y esto queda en claro en la plática que pudimos entablar y que con gran agrado les compartimos en esta ocasión.

N. ¿Cómo puede combatirse el miedo a morir por la defensa de una sociedad justa en México desde la perspectiva del escritor y el ciudadano?

EP. Los ciudadanos debemos participar en la vida del país, no podemos desentendernos y eso suele responder a una clase social. Yo he visto que la gente rica parece no preocuparse por nada, los ricos del mundo parecen apátridas. No les importa lo que les sucede en su país y te da la idea de gente muy limitada.

Como periodista yo quiero ir a donde no conozco, oír lo que nunca me han dicho.

N. En relación a la Noche de Tlatelolco deseo preguntarle yo leí el libro siendo adolescente y remontándome a esa lectura me quedaron muchas preguntas al finalizar el libro tales como el origen, las consecuencias ¿cuándo usted escribió esta crónica había una intención que la lectura quedara abierta?

EP. Era más bien la indignación cuando yo lo escribí, ninguno de los periódicos quería publicar nada, ni siquiera el periódico donde yo escribía que era Novedades quería publicarlo, incluso la entrevista con la italiana Oriana Falacci, porque había orden de la Presidencia de la República que no se publicaran más noticias.

Entonces yo guardé todo y recuerdo que tenía sobre el escritorio una pila de papeles y llegó mi editora Neus Espresate que es catalana como todos los grandes editores y me dijo “¿qué es todo esto que tienes acá?” y yo le contesté “es lo que me han rechazado de Tlatelolco” y luego luego me dijo “Yo te lo publico”, entonces lo publicó de inmediato lo cual fue muy gratificante para mi. Y es un libro que todavía tiene vigencia después de 46 años.

N. Tristemente tiene mucha vigencia en México ante los hechos actuales ¿Cree que en México lleguemos a un punto que lo podamos superar?

EP. Le toca a la gente joven como ustedes intervenir, tanto fuera como dentro de México.

Ahora los estudiantes como por ejemplo los del Politécnico pueden debatir muy bien. Yo creo que el México nuevo va a salir de los jovenes, de su rabia, de su no dejarse y de su inteligencia para lograrlo y de su capacidad para hacer lo que les toca hacer, que es derrocar al sistema político corrupto.

N. Las mujeres en México y usted es un gran ejemplo son motores y generadores de cambio, estoy en pensando en su trabajo con la Noche de Tlatelolco, en periodistas como Carmen Aristegui, Lidia Cacho o incluso en las clases populares son mujeres las que toman la batuta al ver que sus maridos e hijos pierden la vida.

En este tono y en base a su obra que siempre ha escogido a mujeres destacadas como Leonora Carrington, Tina Modotti y Angelina Beloff ¿existe en este proceso creador un sentimiento  liberador al impulsar a estas figuras en su obra?

EP. Bueno en realidad aquí hay dos preguntas. Lo que creo es que por ejemplo Lidia Cacho, es una mujer admirable, somos amigas, Carmen Aristegui es una mujer valiosísima, hay una actriz Jesusa Rodríguez, que se burla de todas las convenciones, pero son gotitas de agua en un mar de iniquidad, en una cloaca. Aristegui al estar en la televisión tiene más radio de acción ella denunció que el Presidente mientras sucedía todo esto, él se estaba haciendo de una casa en las Lomas con valor de 7 millones de dólares que pagaban los chinos a cambio de que a ellos se les diera la concesión para construir un tren que comunicara con México.

Y muchas mujeres que llegan al poder, senadoras o diputadas adoptan la forma de ser de los hombres y se olvidan por completo de las mujeres y hacen lo que les dicen los hombres, son ejemplos aislados los que mencionas, el chiste es que nosotros tengamos espíritu de continuidad, yo ya voy de salida, pero que sigamos luchando a pesar de todo. Es más fácil irse del lado de las convenciones y de lo establecido que del lado del cambio social, porque además es agotador. En el 68 pensé que jamás habría una masacre como la del 2 de octubre y ¿qué pasa 46 años después? otra masacre.

He escrito muchas novelas sobre las mujeres porque son las grandes abondonadas de la historia, pues nadie les hace caso.

N. Me llamó la atención su comentario de cómo incluso las mujeres al llegar al ejercicio del poder en México se corrompen ¿cómo inocularnos contra este virus de la corrupción? Lo vimos incluso con las administraciones pasadas que perdieron durante 12 años esta oportunidad de lograr el cambio.

EP: De hacer algo y no lo hacen, pero igual los políticos  tratan al país como un rancho de su propiedad y se enriquecen, en México tener un puesto en la administración pública es una fuente de enriquecimiento segura, de ahí nadie sale pobre y el que sale pobre dicen de él “ay, es un pendejo.”

N. Me parece que lo poco que hemos logrado como sociedad civil, a raíz de la masacre en Ayotzinapa es que públicamente la actual administración bajo la presión que se le ha impuesto ha tenido que admitir que éstos desaparecidos no estaban vinculados con el narcotráfico ni a ningún grupo delictivo, porque hasta donde recuerdo ningún representante del gobierno llegara a este tipo de conclusiones.

EP. Creo que tienes toda la razón, creo que si es un logro como tú dices, pero de todos modos, lo que tenemos que desear es que la sociedad civil siga luchando, los que están luchando sobre todos son los jóvenes, los padres de los 43 muchachos también han sido muy valientes. Es un primer paso, pero muy importante, el paso debe encontrar cauce, salidas, los periódicos han sido valientes, incluso los periódicos de derecha si han criticado al gobierno, es un logro que no se tuvo en el 68, en ese entonces llegó una orden de Presidencia y ahora si los periódicos han manifestado su indignación porque ya es demasiado.

N. Para concluir ¿Quién es Elena Poniatowska?

EP. Uno se define siempre a partir de los otros, porque uno se ve través de los ojos de los otros, yo no sabría definirme así solita, porque tengo poco tiempo para pensar en eso y ahora cada vez menos porque ya tengo 82 entrando a los 83, así que me quedan siete años si bien me va.

Espero con toda mi alma hacer lo que me queda por hacer, escribir los libros que me quedan por escribir y estar, ahora ya hay cosas que ya no podré hacer como ser reportera de guerra porque lo único que causaría serían problemas.

(Las preguntas para esta entrevista fueron elaboradas de manera conjunta por Ángels Martínez y Omar Villasana).

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